Sobre el fondo: “son jóvenes de todo el mundo se unen para celebrar su fe junto al Papa, al pie de la Cruz, y forman la corona de la Virgen de la Almudena, patrona de Madrid.
En la corona destaca la “M” de María, también inicial de Madrid, lugar del encuentro.
La Cruz, señal del cristiano, preside la cita del Papa con los jóvenes, que hacen visible con su testimonio el tema de la JMJ: “arraigados y edificados en Cristo, firmes en la fe”.
“La marca para la Jornada Mundial de la Juventud es, en sí misma, una catequesis, una oportunidad de evangelización: el camino rápido y seguro para llegar a Cristo es la Virgen María, Madre de Dios y de los hombres. Los jóvenes tienen, en la fe de María, el ejemplo y el modelo para llegar a Cristo y cumplir la finalidad prioritaria de la JMJ: dar a conocer al mundo su mensaje”.
Sobre la forma: “El símbolo posee un trazo espontáneo y firme, como la juventud del siglo XXI. Es cercano, afable, abierto. Alegre, desenfadado y positivo”.
Sobre el color: “El uso de una paleta de colores cálidos (rojo, naranja y amarillo) transmite una calidez y un calor inconfundibles, señas de identidad de una ciudad como Madrid, de un país como España. Estos colores son reflejo también de la “calidez divina”, del Amor trinitario”.