Un espacio de diálogo e intercambio sobre la realidad juvenil intra y extraeclesial. Una ayuda para conocer y amar mas a Dios. Un espacio, para la eternidad.
28 de noviembre de 2008
Converso
23 de noviembre de 2008
Nuestra solución: Que Cristo reine en nuestro corazón.
19 de noviembre de 2008
20 de noviembre ¿revolución de la VIOLENCIA?
18 de noviembre de 2008
¿Qué debemos hacer, ante una falta o un pecado ciertamente cometido?
Nos responde el Santo de la dulzura. Escuchémoslo con atención.
«Uno de los mejores ejercicios que podemos hacer practicando la dulzura, es el que tiene como mira nuestro propio ser, y consiste en no enojamos nunca con nosotros mismos ni con nuestras imperfecciones; pues aunque la razón pide que si cometemos faltas nos sintamos tristes y contrariados, conviene evitar ser presa de una desazón despiadada y cruel. Por lo cual caen en grave error los que, estando encolerizados, se lamentan de haberse encolerizado, se entristecen de haberse entristecido y sienten despecho de haberse despechado. De esta forma tienen el corazón amargado y lleno de malestar; y aunque parezca que este sentimiento de cólera neutraliza al anterior, no es así, pues no es más que un tránsito para otro acceso de ella en la primera ocasión que se presente. Además, estos movimientos de cólera, malhumor y desazón contra sí mismo, son causa de orgullo y tienen su origen en el amor propio, que nos turba e inquieta al vemos tan imperfectos...
Créeme, Filetea, al igual que las reprensiones de un padre, hechas con dulzura y cordialidad, ejercen un poderoso influjo sobre el hijo a quien se quiere corregir, y más que las frases coléricas y airadas, así, cuando nuestro corazón comete alguna falta, si le reprendemos con palabras dulces y razonables, usando más de la compasión que de la pasión, animándole a la enmienda, el arrepentimiento que concebirá será más eficaz y sincero que si empleamos palabras ásperas y desabridas...
Eleva, pues, dulcemente tu corazón cuando caiga, humillándote delante de Dios mediante el reconocimiento de tu miseria, sin desanimarte por la caída; pues nada tiene de extraño que la debilidad sea enferma ni que el miserable esté sujeto a la miseria. Detesta con todas tus fuerzas la ofensa que Dios ha recibido de ti y, con gran ánimo y confianza en la misericordia divina, vuelve a emprender el camino de la virtud que habías abandonado.»
amor NO del BUENO
9 de noviembre de 2008
Lo principal: lo espiritual.
31 de octubre de 2008
¿QUE ES SER SANTO?
- Un santo es un avaricioso que va llenándose de Dios, a fuerza de vaciarse de sí.
- Un santo es un pobre que hace su fortuna desvalijando las arcas de Dios.
- Un santo es un débil que se amuralla en Dios y en El construye su fortaleza.
- Un santo es un imbécil del mundo ‑stulta mundi‑ que se ilustra y se doctora con la sabiduría de Dios.
- Un santo es un rebelde que a sí mismo se amarra con las cadenas de la libertad de Dios.
- Un santo es un miserable que lava su inmundicia en la misericordia de Dios.
- Un santo es un pária de la tierra que planta en Dios su casa, su ciudad y su pátria.
- Un santo es un cobarde que se hace gallardo y valiente, escudado en el poder de Dios.
- Un santo es un pusilánime que se dilata y se acrece con la magnificencia de Dios.
- Un santo es un ambicioso de tal envergadura que sólo se satisface poseyendo cada vez más y más ración de Dios...
- Un santo es un hombre que todo lo toma de Dios: un ladrón que le roba a Dios hasta el Amor con que poder amarle.
- Y Dios se deja saquear por sus santos. Ese es el gozo de Dios.Y ése, el secreto negocio de los santos.
27 de octubre de 2008
MACTE NOVA VIRTUTE PUER SIC ITUR AD ASTRA.
24 de octubre de 2008
CRISTIANOS VERDADEROS.
Eston son los Cristianos Verdaderos:
Aquellos en los cuales Cristo
Ha entrado a fondo,
Ha tomado todo en ellos,
Ha transformado su vida,
Viven un Cristianismo que les transfigura,
Que se comunica,Que ilumina.
Son la Buena Nueva permanentemente anunciada.
Todo predica en ellos,La palabra, sin duda,
Pero también la sonrisa,
Y la bondad y la mano tendida,La resignación,
La ausencia total de ambición,
La alegría constante.
Abrazándose serenamente a las dificultades,
Olvidados de si mismos,Entregados...
Ni el menosprecio de los grandes,
Ni la oposición sistemática de los poderosos,
Ni la pobreza,Ni la enfermedad,Ni las burlas...
Tienen fe, esperan,
En medio de sus dolores son los felices del mundo.
Su corazón dilatado hasta el infinito se alimenta de Dios.
¿Quisieras ser mendigo?
Les presento un texto que ha sido anárquicamente adjudicado a distintas personas en distintas ocasiones, y por distintos motivos que nada tienen que ver con lo que realmente sucedió. Pronto les contaré estos abusos que se han dado con este texto.
Hace unos años, en el programa de televisión de
“Un sacerdote norteamericano de la diócesis de Nueva York se disponía a rezar en una de las parroquias de Roma cuando, al entrar, se encontró con un mendigo. Después de observarlo durante un momento, el sacerdote se dio cuenta de que conocía a aquel hombre. Era un compañero del seminario, ordenado sacerdote el mismo día que él. Ahora mendigaba por las calles.
El cura, tras identificarse y saludarle, escuchó de labios del mendigo cómo había perdido su fe y su vocación. Quedó profundamente estremecido.
Al día siguiente el sacerdote llegado de Nueva York tenía la oportunidad de asistir a la Misa privada del Papa al que podría saludar al final de la celebración, como suele ser
Un día después recibió la invitación del Vaticano para cenar con el Papa, en la que solicitaba llevara consigo al mendigo de
El Pontífice, después de la cena, indicó al sacerdote que los dejara solos, y pidió al mendigo que escuchara su confesión. El hombre, impresionado, les respondió que ya no era sacerdote, a lo que el Papa contestó: “una vez sacerdote, sacerdote siempre”. “Pero estoy fuera de mis facultades de presbítero”, insistió el mendigo. “Yo soy el obispo de Roma, me puedo encargar de eso”, dijo el Papa.
El hombre escuchó la confesión del Santo Padre y le pidió a su vez que escuchara su propia confesión. Después de ella lloró amargamente. Al final
EL HOMBRE Y EL MUNDO
Altas y bajas de la bolsa. Temor y mas terror. Espirales de violencia inexplicables. Anarquia institucional generalizada y un largo etcétera nos dicen que nuestro mundo no anda bien. Algo tiene que arreglarse.
Un científico, que vivía preocupado con los problemas del mundo, estaba resuelto a encontrar los medios para aminorarlos.
16 de octubre de 2008
El embrión: no algo, sino alguien.
Aunque algunos quieran obviarlo, es perfectamente reconocido por la comunidad científica internacional el hecho de que el ser humano aparece cuando se produce la polarización del resultado de la unión de los pronúcleos de los gametos femenino y masculino (óvulo y espermatozoide). Es ese mismo instante, ni antes, ni después, comienza el ciclo vital de un nuevo ser, el cigoto, que aparece como distinto, único e irrepetible. Así lo ha reconocido el prestigioso genetista Jérôme Léjeune: «aceptar el hecho de que después de la fecundación existe un nuevo ser no es más una cuestión de gusto u opinión. No es una hipótesis metafísica, sino una evidencia experimental».
Del ciclo vital embrional (también llamado proceso epigenético humano) se puede destacar tres características principales:
– Coordinación. Desde la fusión de los gametos hasta la formación del disco embrional, hacia el día 14, se produce un proceso en el que se da un coordinado subseguirse e integrarse de actividades celulares bajo el control del nuevo genoma (el ADN de cada una de las células), modulado por una ininterrumpida cascada de señales que se trasmiten de célula a célula, y del ambiente extracelular y extraembrional a cada una de las células. Esta innegable característica implica y exige una rigurosa unidad del ser en desarrollo.
Estos hechos llevan a concluir que el embrión no es un mero agregado de células, sino un individuo en el que cada una de las células que se van multiplicando están implicadas estrechamente en un proceso.
Recientemente se ha comprobado mediante modernas técnicas audiovisuales que el cigoto es un ser vivo organizado. Desde el primer momento se produce una polarización que determina los ejes, que a su vez establecen la orientación de los planos cabeza-cola, dorso-vientre y derecha-izquierda. Incluso estos ejes fijan el sitio por donde se implantará en el útero.
– Continuidad. A las pocas horas de la fusión de los gametos (la reunión del contenido cromosómico de los dos núcleos se denomina amfimixis) se forma el cigoto (embrión unicelular). Posteriormente, se producen divisiones en esta célula. Al cabo de seis o siete días, el cigoto se denomina blastocisto (embrión multicelular de más de 32 células). Éste continúa las divisiones celulares. A los siete o nueve días el blastocisto se implanta en el útero de la madre. Al término de esta etapa, hacia el día 14, el blastocisto se ha organizado como disco embrionario bilaminar. Posteriores divisiones transforman el disco embrionario en trilaminar. A partir de estas tres capas se originan todos los tejidos es la expresión de una sucesión de acontecimientos encadenados sin interrupción; si hay interrupción se da patología o muerte. Esta continuidad implica y estable la unicidad del nuevo ser en su desarrollo.
– Gradualidad. Es evidente que la forma definitiva se alcanza gradualmente. Es un desarrollo permanentemente orientado, a causa de una intrínseca ley epigenética, desde la fase de cigoto hasta la forma final.
Resulta evidente que con la fusión de los dos gametos humanos, un nuevo ser humano comienza la propia existencia o ciclo vital, en el que realizará autónomamente todas las potencialidades de que está intrínsecamente dotado. El embrión, pues, desde el resultado final de la fusión de los lamentos ya no es un potencial ser humano, sino un real ser humano, un ser perteneciente a la especie humana, que como todo miembro de dicha especie merece ser respetado.
La introducción abusiva del término «preembrión» ha resultado ser una estrategia para tranquilizar la conciencia y permitir la experimentación hasta el final de la fase de implantación. Se concluye que el embrión no existe durante las primeras dos semanas que siguen a la fecundación.
El término «preembrión» fue acuñado en 1984 por A. McLaren, conocida embrióloga inglesa y miembro del Comité Warnock, por influjo de cierta presión ajena a la comunidad científica, con la intención de manipular las palabras para polarizar una discusión ética.
El término «preembrión» no es científicamente aceptable, pues, si entendemos por «preembrión» aquella que existe antes del embrión nos referimos a las células germinales (óvulo y espermatozoide). En este sentido, conviene resaltar que la palabra «preembrión» sólo aparece citada tres veces en las revistas internacionales especializadas del año 2002, mientras que la palabra «embrión preimplantatorio o temprano» aparece más de setecientas veces. Por ello, a nuestro juicio, la inclusión del término «preembrión» no tiene otra finalidad que despojar al embrión temprano de su carácter de embrión humano vivo, para así poder manipularlo y/o eliminarlo sin trabas éticas.
Desde el punto de vista moral, ya la admisión de la probabilidad de estar ante un ser humano (insuprimible en el estado actual de los estudios) tiene un peso decisivo. Es evidente que quien se encuentra ante una sombra, y duda de si es un jabalí o un hombre, si le dispara, se hace culpable de homicidio. Antes de disparar tiene el estricto deber moral de asegurarse de que no es un hombre. Este mismo principio ético se aplicaría al caso que estamos estudiando.
En resumen, el embrión, desde la fusión de los pronúcleos de los gametos femenino y masculino (llamado singamia y que tiene lugar aproximadamente a las 22 ó 24 horas después de la inseminación), ya no es un potencial humano, sino un real ser humano, que como tal merece ser respetado como todo miembro de dicha especie.
No es una parte o apéndice de la madre, sino un ser autónomo en el sentido de otro ser distinto al que los progenitores. El embrión humano es un nuevo individuo, un ser humano en acto, que a lo largo de su vida, en un proceso continuo, gradual, y coordinado irá desarrollando las diferentes estructuras que integrarán el organismo adulto.
Absurdo, pues, que en el Distrito Federal, se haya legalizado el crimen del aborto diciendo que no hay nada los primeros 15 días despues de la concepción. Como absurdo será también -Dios no lo permita- que esta legalización se extienda a todos los estados de la republica.
15 de octubre de 2008
Amarse SI. Usarse NO. Somos ALGUIEN no ALGO.
La criatura racional es un sujeto personal con una dignidad propia. El hombre, por el hecho de ser un sujeto personal, tiene una dignidad. No puede ser considerado, valorado, querido como una cosa, un objeto, un medio para obtener un fin; sino como un fin en sí mismo. De ahí, que el dilema que permanentemente se le presenta a
Además, el hombre tiene un fin sobrenatural, una vocación divina inscrita en los más profundo de su ser humano, sea adulto o embrión, enfermo o sano, hombre o mujer, existe un reflejo divino, una vida que tiene a la eternidad, a participar de la vida intratrinitaria.
«La razón más alta de la dignidad humana consiste en la vocación del hombre a la comunión con Dios. El hombre está invitado al diálogo con Dios desde su nacimiento, pues no existe sino porque, creado por Dios por amor, es conservado siempre por amor; y no vive plenamente según la verdad si no reconoce libremente aquel amor y se entrega a su Creador» (Gaudium et spes 19, 1).
13 de octubre de 2008
¡Y la Luz brilla en las tinieblas!
11 de octubre de 2008
ROMERIA NUESTRA SEÑORA DE ZAPOPAN
8 de octubre de 2008
ESPERANZA CON VISION. una corazonada de fe
Dios tiene una característica, un atributo que muy pocos se detienen a considerar: es OMNIPOPERFECTO; en Él no hay planes sin realizar, no hay proyectos comenzados sin terminar, no... “Todo esta cumplido”. Lo que inicia lo termina. Por esto me atrevo a decir que estas próximas décadas son una procesión hacia la edad de fuego. El Espíritu continuará enviando juventudes. Suceda lo que suceda, la fuerza del Viento Divino no menguará. Las corrientes lumínicas triunfarán, las tinieblas no podrán vencer. El fuego victorioso de Dios procedente de Cristo en la Cruz y de su Padre Celestial se extenderá por todas partes.
El evangelio ha comenzado a proyectar su mensaje en los hombres del siglo XXI, un mensaje que es aliento para los tímidos, fortaleza para las tambaleantes, roca fuerte para los santos de hoy y del mañana y esperanza de cielo para todas los valerosos.
Me dirás un ¡momento! ¿Por qué tanto optimismo? ¿Por qué hay Cristianos que piensan así? Te respondo: Porque creemos con fe firme en aquél que dijo “las tinieblas no prevalecerán”. Creemos a aquél que dijo “Y la luz brilla es las tinieblas, y las tinieblas no la pudieron asfixiar”. Creemos en el triunfador eterno, que brilla omnipotente sobre todos los siglos, cuando nos dice: “Yo soy el Alfa y el Omega. El que vive. Estuve muerto pero ahora estoy vivo por los siglos de los siglos...” Creemos en Cristo que es Dios y Dios "Pantócrator" (todopoderoso), que es el mismo ayer y hoy y por los siglos de los siglos. Creo en las promesas que ha hecho en su paso por la tierra. Él dijo que nos enviaría un abogado, “el Espíritu Santo”. Su misión: darnos fortaleza en tiempos de languidez, alegría en tiempos de tristeza, fuerza para interiorizar la verdad en tiempos de apostasía.
Y creemos en que las crisis del último siglo y de todos los siglos (y la de estos tiempos) encontrarán su solución en las alturas. Contamos con su ayuda y fuerza poderosa “Yo estaré con vosotros hasta la consumación de los siglos”. Nuestros días son un trozo de estos siglos pero El está todo entero con nosotros. La luz de Dios, el Fuego divino y divinizador está con nosotros para despertarnos de nuestras crisis.
VISION CON ESPERANZA visión real.
No tenemos de qué quejarnos del Cristianismo. Setenta generaciones no puntúan en una Iglesia que es eterna. ¿Qué la sociedad occidental – cristiana está en crisis?... Tal vez sí; pero el Cristianismo no está en Crisis. Está vivo y joven.
Es verdad que al contemplar el despegue del Tercer Milenio emergen ante nuestros ojos las vidas de algunos cristianos “en crisis”, sus almas me recuerdan los horrores de los campos de concentración y a las víctimas de Hiroshima y Naghasaki. Ha estallado en su corazón el explosivo del formidable poder destructor... ¿Quién lo ha lanzado? Una mano negra se esconde entre los años de las últimas décadas del siglo XX. Tiene los símbolos grabados: el de los ateos y el de los materialistas.
Pero también he recordado que sólo hay un poder capaz de reconstruir estos daños, de sanar estas heridas y de inyectar dosis de vida divina en las oscuridades de estos tiempos. Sólo el Cristianismo posee esa fuerza omnipotente que nació en Cristo, y sigue creciendo pujante como hierba buena, hasta que llegue el momento de la siega.
Hemos despegado ¡sí! y todos somos testigos desde las alturas del siglo XXI de la lucha santa de los Cristianos: ¡ tiene un nuevo vigor!. Ha vuelto a soplar el viento endinamizador. El Espíritu ha lanzado sobre el planeta un nuevo huracán que hincha las velas de la Iglesia de Cristo. Sus intensas corrientes se desplazan desde el hemisferio sur hasta el norte, desde oriente hasta occidente encendiendo, renovando y transformando a todas las almas que encuentra a su paso. El aire fresco con aromas divinos comienza a despertar conciencias dormidas. Pone en guardia a todos aquellos que narcotizo la mediocridad de los años 60`s y las herejías antiguas y modernas.
Estas corrientes vivificantes inundan los ambientes calcinados por las guerras y esterilizados por el hedonismo.
Desde el centro del Huracán el anillo del pescador bendice los brotes jóvenes de la viña. Aunque no lo creas, la viña está viva: no muere ni morirá jamás. El Poder sin límites hace brotar vocaciones al sacerdocio, a la vida religiosa y al estado segar consagrado. Nuevos institutos religiosos dejan atónitos con su eclosión en el seno de la Iglesia a los pesimistas y a los perseguidores luciferinos. Ellos, los nuevos Cristianos comienzan ya a ser en medio del mundo y dentro de la iglesia una inyección intravenosa en el torrente circulatorio la sociedad. Una inyección de luz.
7 de octubre de 2008
7 OCTUBRE: ¡Rosario bentito de María!
¿Que es el Rosario? un espacio espiritual para el encuentro con Dios. Es el espacio que todos necesitamos para llegar a ser lo que Dios ha pensado de nosotros. Es donde Dios nos configura, nos cristifica, nos tranforma, con el amor maternal de la Virgen. ¡Prueba esta oración! Será fuente de vida para ti. Solo donde hay un " Si" hay vida. Y María dice "Si" a Dios. Aprende de Ella a vivir. Aprendamos de ella a dejarnos tranformar de una vez por todas por Dios. ¡Mar adentro! Hacia la santidad.
24 de septiembre de 2008
A propósito de la fiesta de Nuestra Señora de las Mercedes.
Maria Desolada.
No tengo otra madre fuera de ella.
En ella está toda la Iglesia para la eternidad,
Y toda su obra en la unidad.
En su designio el mío.
Iré por el mundo reviviéndola.
Toda separación será mía.
Todo despego del bien que he hecho,
Una aportación para edificar a María.
En su Stabat, mi “estar”.
En su Stabat, mi “ir”.
Hortus conclusus
y fuente sellada;
cultivaré sus virtudes más amadas
para que sobre mi nada silenciosa
resplandezca la Sabiduría de Ella.
Y que muchos, todos sus hijos predilectos,
Los más necesitados de su misericordia,
Tengan por doquier su maternal presencia
En otra pequeña María.
21 de septiembre de 2008
¿Qué es el relativismo?
El relativismo no es una negación, sino una corrupción de la verdad. Para el relativismo las verdades no son válidas para todos ni para todos los tiempos. No hay nada absoluto en la ciencia humana. Las verdades son variables. Hoy una cosa es verdadera y mañana podría no serlo. Lo que es verdad para un entendimiento, puede no serlo para otro. Incluso algunos han llegado a pensar que “en otros mundos de hábitos mentales diferentes de los nuestros, dos y dos, podrían sumar cinco” (Suart Mill). El relativismo es una enfermedad de la razón y una putrefacción de la verdad.
En la mayoría de nuestros jovenes lo único absoluto que hay es que todo es relativo. Sin comentarios.
20 de septiembre de 2008
HIZO EXTRAORDINARIAMENTE LO ORDINARIO
SANTA GIANNA BERETA
Nació en Magenta (Italia) el 4 de octubre de 1922. Sus padres fueron fervientes cristianos y tuvieron trece hijos, de los cuales murieron cinco a edad prematura y tres se consagraron a Dios: uno como sacerdote diocesano, otro misionero capuchino y una religiosa canosiana. El jefe de familia fue un gran modelo para sus hijos, especialmente sobresalía su piedad eucarística. Acudía diariamente al Santo Sacrificio con una profunda reverencia. Gianna, contagiada del fervor de su padre, tras realizar su primera comunión, con sólo 5 años, no dejó ya de acompañarle a la Santa Misa todos los días.
Pasados los años Gianna se convirtió en una jovencita admirable: Compaginaba su vida de piedad con el amor a la música, a la pintura y a la naturaleza.
En 1937 su familia se trasladó a Quinto al Mare, cerca de Génova. Allí comenzó a frecuentar la Acción Católica, grupo al que pertenecería toda su vida.
A los 16 años realizó unos ejercicios espirituales que marcaron felizmente el destino de su existencia y le encauzaron por los rieles de la santidad. Su instintivo horror al pecado la llevó a tomar la firme resolución de morir antes que ofender gravemente al Señor.
A lo largo de su vida no le faltarían las ocasiones para demostrarlo. Primero tuvo que interrumpir sus estudios a causa de su mala salud y después, con sólo 20 años, perdió a su padre y a su madre, que eran su gran sostén.
Gianna tuvo que vivir un tiempo con sus hermanos. Después se matriculó en la facultad de Medicina, primero en Milán y luego en Pavía. Tras finalizar felizmente la carrera, y debido a su amor por los niños, se especializó en la rama de pediatría.
Mientras, su espiritualidad se enriquecía notablemente. Además de asistir diariamente a la Santa Misa, también consolidó las visitas al Santísimo, la meditación y el Santo Rosario. Esta vida interior se refleja al exterior mediante las obras: cada vez se comprometía más en el apostolado. Veía en el amor al prójimo la mejor forma de amar a Dios. No sólo se conformaba con amar a sus semejantes, sino que buscaba con ahínco que estos amasen a Dios.
Dentro de la Acción Católica tomó parte en las Conferencias de las Damas de San Vicente y en la Federación de Universitarios Católicos.
En esa época consiguió un gran equilibrio interior y empezó a irradiar hacia fuera un rostro sereno, una sonrisa dulce y una gran paz en el alma.
Durante un tiempo pensó que su vocación podía hallarse en el mundo misionero, hasta que comprendió que Dios le marcaba otra senda: la del matrimonio.
En 1955 se casó con el empresario Pietro Molla, perteneciente también a la Acción Católica y laico comprometido en la parroquia de Mesero.
Ambos se prepararon con tres días de oración antes de recibir el sacramento del matrimonio. Su sueño fue tener muchos hijos para la gloria de Dios. Tras tener sus tres primeros retoños sin problemas, en el cuarto embarazo se le detectó un tumor en el útero.
Se hizo operar pero pidió expresamente que no pusiesen en peligro la vida que llevaba en el vientre, consciente de que con esta medida no se erradicaría por completo el tumor. Por fin el 21 de abril de 1962 nació su hija, a la que bautizaron poco después con el nombre de Gianna Emanuela. Salvar la vida de la criatura tuvo un precio muy caro: la vida de la madre, que ella ofreció voluntariamente por salvar a su hija. El cáncer se había extendido rápidamente durante los nueve meses de embarazo, por lo que Gianna falleció el 28 de abril con agudos dolores.
Ejemplo de mujer, de laica, de esposa y madre de familia, siempre abierta a la vida, S.S. Juan Pablo II la canonizó en mayo del 2004. Su fiesta se celebra el 28 de abril.
19 de septiembre de 2008
Jovenes Catolicos Hoy
¿Qué es Amar?
Entre los hombres, todo habla de amor, grita amor, canta amor, llora amor. En nombre del amor, trabajan, sufren toda su vida, se abrazan o se pelean, dan la vida o matan ¿No es acaso la historia humana una impresionante búsqueda de amor, sembrada de maravillosos éxitos y de monstruosos fracasos?
Es cierto que la aspiración más profunda del corazón del hombre es el deseo de amar y ser amado, puesto que, en el pleno sentido de la palabra, su razón “de ser” es el AMOR: ha sido creado por amor, y para el amor y sólo en el amor puede desenvolverse. Pero existen múltiples confusiones sobre el amor, Esta palabra mágica, repetida a troche y moche, encubre formas de vida tan alejadas unas de otras como lo blanco y lo negro, la vida y
El hombre con harta frecuencia, no sabe amar; cree amar y no hace sino quererse asi mismo. A lo largo del camino que lleva el amor, muchos se detienen seducidos por los espejismos del amor:
- Si te “emocionas hasta las lágrimas” ante un sufrimiento,
- Si sientes palpitar fuertemente el corazón ante tal o cual persona, esto no es amor sino sensibilidad,
- Si te “dejaste prender” en su poder pacífico o en su encanto,
- Si, seducido, “te abandonas”, no es amor sino una rendición.
- Si, turbado, te extasías ante su belleza y la contemplas para gozar de la misma,
- Si su espíritu te parece distinguido y buscas el placer de su conversación, no es amor sino admiración.
- Si quieres a toda costa conseguir una mirada, una caricia, un beso.
Amar no es sentirse emocionado por otro,
sentir afecto sensible por otro,
abandonarse a otro,
admirar a otro,
desear a otro,
querer poseer a otro.
Amar, en su esencia, es entregarse a otro y a los otros.
–– Amar no es “sentir”. Si esperas sentirte empujado al amor por la sensibilidad, amarás a pocos, en la tierra... y a buen seguro, no a tus enemigos. Amar no es un paso instintivo sino la decisión consciente de tu voluntad de ir hacia los otros y entregarte a ellos, como lo hizo Cristo Jesús. Amen.